domingo, 15 de noviembre de 2015
#Nuclear Storm
El cielo finalmente se torna verde y los rayos comienzan a desgarrar camino hacia mi. Duele y quema, lo siento en la piel. Es como si no estuviese ahí, sigue su círculo, sigue su rumbo, no estoy. Enfrento el viento, el frío y caliente viento, tomo su dirección contraria. La piel empieza a sangrar, parece que sabe por fin que estoy ahí. Toma camino por sus pequeñas heridas y se adentra en mi cuerpo, me invade, me quema desde adentro esta vez. La tormenta está dentro mío ahora, y los rayos quieren salir. Oh, pobre niño, atrapado dentro de la tormenta, atrapado dentro mío. Corro y corro, en contra del viento, corro. Mi sangre se vuelve verde, su temperatura es mayor y yo no lo impido. Tiro el cuchillo, tiro mis lentes, tiro todo lo que no voy a necesitar, lo descarto. Sólo yo, contra el viento. Me queda poco tiempo, pero llegaré, llegaré. Las nubes empiezan a sofocarme, los rayos atraen mi piel, quieren encontrarse. Me abro al ojo de la tormenta, el viento cesa. Nunca intenté escapar, estoy donde quiero. Ahora le pertenezco.