lunes, 10 de abril de 2017

#Fugitivo

Me estaba esperando, y allí escrito oía mi nombre. Ya comienzo parado sobre un sabor, amargo como tu mirada acertando en provecho un futuro. Inquietos se ponen todos al oír estas palabras, porque nadie comprende que no tiene por qué haber un camino fácil hacia el por qué de todo lo que existe frente a tus ojos, o los míos. Callá, no hay nada que sepas, ni yo. Esto es un simple mensaje codificado para quien opine que nada es verdad y en la vida no existe lo que creemos que está ahí, aunque sí, pero no de la forma que vos creés.

Entonces aprovecho a cambiar, y mientras gira miro mi nombre, es otro de esos mensajes que siento que tengo que descifrar. Un giro en mi vida, o simplemente de cabeza. Repite mi nombre y no quiero darme vuelta, porque mis brazos agarran mis brazos, y de costado no me puedo mover. Alguien, yo, no me lo permite. Te cuento el final, porque sabiéndolo se lo puede cambiar.

Perdón, empecemos de vuelta. 115 veces ya lo escribí. Hoy, por primera vez, me llegarán a entender.

Después de correr lejos, escondido entre las gigantes plantas que alimentan tu futuro muerto, encontré una puerta. Ésta conducía a un lugar que sólo yo conozco, pero de él no puedo hablar. Aquellos quienes cierren los ojos para tenerlos abiertos pueden ingresar, dejando de lado todo lo que anhelan o anhelaron en sus vidas. Es un precio más alto que cualquier papel sin alma intente comprar. Sencillo y al plato, sin trucos e ilusiones. Bajo tus manos recuentas los misterios, ellos no saben de qué hablás, pero vos tampoco. Estás loco, solamente necsitás un lugar para confesarlo y darle a entender a esta persona quién realmente no sos en el fondo, alguien que piensa que todo está acabado. Porque vuelves a girar la cabeza, y esta vez no es para siempre, porque volviste al juego y nadie más está ahí. Este camino es tuyo y de nadie más. De todas maneras infiltré a alguien, creo que se dieron cuenta, porque desde acá escucho las sirenas y huelo los pasos detrás de mi. Alguien quiere mirar mi gusto y mi mente va a hacer lo posible para emanar la fuerza necesaria para quedar atrapado contra el cristal que me separa del mundo. No pienso volver ahí. No algo mundo, pero tampoco puedo contarte.

Nunca te olvides de abrazar a quienes querés. No te olvides de mi.

Voy a hacer lo posible desde el futuro por cambiarlo, así que necesito que luches esta guerra conmigo. Elegí una palabra y recordala, sólo vos, no se la digas a nadie. Hay en juego más de lo que creés. Conectate, hacelo, confío en que vas a enteder de lo que hablo. No es cuestión de querer a todo el mundo, tampoco de odiarlos, tampoco es cuestión de dejarse llevar por esta oración. Distraído en una lucha, aquella contra uno mismo. La palabra se perdió y ahora enfrentás las consecuencias. Otra vez, aquellas que no pudiste ver llegar. Si todavía están acá, me preguntás, la verdad no sabría responderte. Si el acá es donde escribo esto, tampoco. Cuál presente en este momento es el atormentado? Está en vos. Hoy comienza una guerra distinta a la que todo el mundo habla, porque no los involucra. No me dejes perder. No me dejes ganar.